MENSAJE PARA EL GRUPO DE ORACIÓN 

SAGRADOS E INMACULADOS CORAZONES

 14 OCTUBRE DE 2017

Nuestra Madre

Hijos míos, vuestra Mamá Inmaculada se ha hecho presente en medio de vosotros, rodeada de toda la legión de ángeles que el Padre ha puesto para que me acompañen a todos los lugares donde son necesarias mis manifestaciones.

Estos ángeles recogen las oraciones y las súplicas de cada hombre que reza con amor y pide con fe, con confianza y esperanza y junto con vuestros ángeles custodios me las ponen en mis manos, me piden por todos vosotros, las adentro en mi Inmaculado Corazón y de mi inmaculado Corazón pasan al Sagrado Corazón de mi Divino Hijo.

Hijos míos, en este mes de octubre, el mes dedicado a vuestra Madre del Rosario y a esta arma poderosa que es el santo rosario.

Os pido en este mes tan especial que pidáis la conversión de los pobres pecadores, la conversión de vuestros familiares, por los pobres agonizantes que la mayoría se debaten entre el cielo y el infierno. Socorrer en este mes tan especial a las benditas almas del purgatorio para que sean aliviadas, vayan subiendo peldaños y salgan millares de almas del purgatorio.

En este mes junto con el escapulario entra en el purgatorio el santo rosario y se hace inmenso, inmenso y las almas escalaran por él como si de una escalera se tratará.

No olvidaros de ellos, hijitos míos, orar mucho por la situación de España que es muy grave y por la paz del mundo.

Orar mucho por la conversión de los pueblos, cuánto menos pecado haya en ellos, la purificación en los pueblos será más suave, hijos míos.

Orar en este mes y pedir a mi Inmaculado Corazón que venga pronto mi Hijo.

Orar por vosotros, el mal está trabajando en la oscuridad y algunos gobiernos os engañan, os mienten y luego vienen las sorpresas, hijitos míos.

Orar mucho también por el país, Colombia.

También está en grave peligro.

¡Que se espera de los pueblos que los gobernantes gobiernan a su libre albedrío, sin Dios!

¡Que se espera de los pueblos que han perdido la fe y se han olvidado de Dios!

Sodoma y Gomorra comparado con estos tiempos eran mejor que los hombres de este tiempo.

Y mirar, la justa cólera del Padre sobre Sodoma y Gomorra, hijos míos.

Los pecados de ahora se multiplican por los de entonces y el hombre no hace caso de nuestras llamadas, de nuestras advertencias, de las señales que se están mandando por mar y por tierra, hasta, hijos míos, por el firmamento.

Y siguen comiendo y bebiendo, divirtiéndose, sin moral, sin principio, sin fe.

Incumpliendo todos los mandamientos, los mandamientos en este tiempo son pisoteados. Se ríen de ellos, y hacen todo lo contrario a lo que el Padre dictó y dio al mundo para el bien de la humanidad.

Venir pronto a la oración, no seáis perezosos que España y el mundo están muy mal.

Rodear el mundo con el rezo del santo rosario, hijos míos. Es el arma para combatir a Satanás y a todo mal.

Todo se va a poner peor hasta llegar a una gran confusión y no sabréis distinguir y discernir lo bueno de lo malo porque lo malo será mezclado con lo bueno, hijos míos.

Pedir que el Padre mande pronto a su Hijo y al mío para que encuentre algo de fe en la tierra. Si el Padre tardara mucho en mandar a su Hijo y al mío en esta segunda venida, no encontraría fe en ella.

Todo será mezclado y sino estáis bien acimentados en la oración no sabréis discernir.

Y si no estáis unidos tampoco.

Quiero la salvación de todos mis hijos. Orar mucho por la conversión de los pobres pecadores, hijos míos, que el dolor más grande de esta Madre, al igual que de las buenas madres de la tierra, es ver como sus hijos se pierden y se condenan.

El gran dolor de vuestra Madre es ver la condenación de mis hijos y no poder hacer nada por ellos, porque ellos no quieren la salvación.

Orar mucho por la conversión y por la paz en las familias y la unión en ellas, hijos míos.

Manteneros todos unidos en el amor de Cristo y en nuestros Sagrados e Inmaculados Corazones.