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miércoles, 28 de octubre de 2015

MENSAJE PARA EL GRUPO DE ORACIÓN 
SAGRADOS E INMACULADOS CORAZONES


22 DE AGOSTO DE 2015



Nuestra Madre
Vuestra Madre Inmaculada junto con el Paráclito nos hemos hecho presentes en este cenáculo formado por los Corazones Sagrados de Jesús y de María dedicado a la tercera persona de la Santísima Trinidad, el Espíritu Santo y a la precursora, vuestra Madre Inmaculada del Segundo Pentecostés, que soy yo.
Mucho es el mal que abunda en esta tierra mía y que los hombres con su tibieza y olvido han hecho, hijos míos e hijas mías, que el mal se propague en esta España tan amada, tan querida de mi Inmaculado Corazón. Y regada por la sangre de tantos hijos e hijas fieles que han dado su vida por amor a mi Hijo, Cristo.
Esta tierra que en un tiempo fue la envidia por la fe de otros pueblos y que el rey de la mentira en ella podía poco. Pero con el olvido, la tibieza, la soberbia han dado paso a la entrada de Lucifer y sus secuaces en ella. Y mirar, hijas e hijos míos, las consecuencias de todo ello.
España va cayendo poco a poco. Todo el poder y la gloria que el hombre ha creado al margen de Dios, todo va a quedar destruido.
España está pasando por una gran tribulación y purificación para que el hombre contrito y arrepentido porque sino hay contrición y arrepentimiento no puede volver a Dios. Pues contrito, arrepentido llega a los brazos del Padre. Pero cada día que pasa el hombre crece más en soberbia, rebelión contra Dios.
El mal ahora impera y es el bien y el bien es pisoteado  y hacen de él el mal.
Pero ¡hay hijos ingratos que tanto el corazón de Jesús y mi Inmaculado Corazón han dado a España y que ya no os acordáis del amor tan inmenso de vuestro Jesús y de vuestra Madre a esta tierra! Y creéis que caminando con el rey de la mentira y la iniquidad sois libres y estáis jugando a ser más que Dios.
Y lo que sois, sois prisioneros y marionetas de Lucifer y sus secuaces, que os llevan por donde ellos quieren, a la perdición de vuestras almas por toda la eternidad.
Mi Inmaculado Corazón se desgarra al ver a mi España por los suelos porque cada día está peor y más que se pondrá y el hombre soberbio no quiere la luz que derretiría la dureza de sus corazones y volvería a Dios porque se cree libre y poderoso.
Las señales que están mandando el Padre, que son muchas, el hombre no las da importancia. No cree que todo un Dios se preocupe de sus hijos y les avise y mira. ¿a dónde, hija mía, los está llevando?

Rosa
Veo España en tinieblas, los hombres una gran parte de ellos todos negros, caminan como si estuvieran ciegos obedeciendo al rey de la iniquidad sin ellos saberlo. Y en esa ceguera y negrura se creen grandes, se creen poderosos.
¡Ay, Madre quítame esto, por Dios! veo orgias, alcohol, sexo. Mucha juventud dentro de todas estas orgías.
Los poderosos no hacen nada por quitarla, mientras tanto, estos poderosos negros como el tizón se llenan los bolsillos del dinero destinado al pueblo para que todo él viva dignamente. Se creen poderosos, se creen más que Dios, ellos son dioses, según cree.
Veo científicos jugando a crear vida y quieren jugar y están haciendo experimentos en embriones dentro de la madre para hacer a los niños a su imagen y semejanza.
Como hacen como los animales clonándolos.

Nuestra Madre
Si, hija, quieren crear niños con las características que les digan los padres, y eso no viene de Dios. Solo crea vida Dios no el hombre. Un animal creado por Dios es más que un feto creado por el hombre.

Rosa
Los veo rebosantes de soberbia. Se creen grandes, piensan que el mundo está en sus manos. Veo laboratorios donde crean virus para ver luego la reacción que hacen en el hombre y luego sacar las medicinas para curar lo que ellos han creado.
Esos virus, la mayoría, son mortales y muchos hombres mueren a consecuencia de ellos pero no salen a la luz.
¡Dios mío que mal huele! Esto es azufre puro. ¡Dios mío como está tan oscuro! No se ve nada. Los hombres parecen zombis. No se ven unos a otros en la soberbia, en su poder, en la lujuria, en el alcohol, en todos los vicios.
Ahora veo pequeñas lucecitas que alumbran esas tinieblas.

Nuestra Madre
Si, hija mía, estas luces son las almas fieles que nos aman. Los cenáculos, los templos donde se dice la palabra de Dios según está escrita, no todos los templos tienen luz.
Hija mía por la fidelidad de lo que amáis a Dios y a mi, su Madre, Madre del Hijo, Hijo del Padre y Esposa del Espíritu Santo será abolido el mal de España y el Sagrado Corazón de mi Divino Hijo como prometió y mi Inmaculado Corazón reinará en ella y habrá tal luz inmensa y grande que llamará a otros pueblos y vendrán a este país atraídos por la luz y esos pueblos obtendrán el perdón de Dios.

Nuestra Madre
Satanás odia a España y la quiere completamente destruir. Pero yo os digo que cuando creáis que todo está perdido, ese será el final y el comienzo del reino de los Sagrados e Inmaculados Corazones en España y el mal quedará abolido en ella.
Vine a avisar al hombre de que cambiara, de que no llegará a este termino para evitar tanto mal y tanto castigo pero el hombre se ha hecho sordo a nuestras plegarias , a nuestra súplicas y ha caído en las manos del enemigos.
Perseverar, sernos fieles y no temáis porque a nada debéis temer si yo, vuestra Madre Inmaculada y mi Divino Hijo estamos con vosotros.
Y el Padre os ama sin medida y os coge en sus brazos, os abraza, os besa como a niños pequeños, muy pequeños como los tienen sus padres y sus madres en sus brazos. Los buenos padres y las buenas madres, porque también hay mucho niño sufriendo por el desamor de estos padres a estas hijos.
Más aún que un buen padre y una buena madre, más aún, hace el Padre con vosotros, hijos míos e hijas mías.
Y es verdad retiraros de las almas que no os den confianza, orar por ellas pero ser cautos porque os pueden hacer mal con brujerías. Porque España está llena de ella.