Vistas de página en total

jueves, 30 de junio de 2016



MENSAJE PARA EL GRUPO DE ORACIÓN 
SAGRADOS E INMACULADOS CORAZONES
 
 2 ABRIL DE 2016




Jesús
Shalom hijos míos.
Al igual que en el cenáculo me presenté a los apóstoles en medio de ellos, así me presento en este cenáculo formado y dirigido por nuestros Sagrados e in maculados Corazones en medio de vosotros.
Mi amor por cada uno de vosotros y de vosotras no tiene límite al igual que mi paciencia y mi misericordia.
Todos los grupos que caminan en Mi y en mi Madre tienen que estar unidos como si fuerais uno y de esa forma injertados fuertemente a mi Sagrado Corazón.
¡Cuánto os cuesta, siempre poniendo alguna pega o alguna disculpa para tranquilizar vuestras conciencias!
Tenéis que estar alertas y ser astutos y no dejaros engañar por el espíritu de la mentira y de la iniquidad que aprovecha vuestra soberbia para introducirse dentro de vosotros.
Os quiero alrededor de mi Madre y al mío como niños pequeños, como verdaderos hermanos que no pueden vivir unos sin otros.
Los niños regañan pero al momento están juntos porque no pueden pasar sin el hermano.
Y los niños no se separan de su madre y de su padre porque no pueden estar sin ellos.
Así os quiero a vosotros, uniros fuertemente como verdaderos hermanos aceptando cada uno como sois, pues Yo así os acepto.
Y no separándoos de Mí y e mi Madre. Tenéis que crecer junto en Mí, unidos a Mí, unidos a la pastora que he puesto en este rebaño. El canal por donde nos comunicamos la Trinidad y mi Madre, santos y ángeles y almas del purgatorio que el Padre permita que vengan y os traigan su amor los ángeles, su protección y su ayuda y el amor del Padre, del Paráclito y el mío, hijos míos.
Al igual que las almas del purgatorio cuando vienen agradeciendo o pidiendo vuestra ayuda.
En el cielo no van unos por un lado y otros por otro sino todos unidos como una piña. Todos uno en Mí, en el Padre y en Paráclito, así os quiero Yo en esta tierra, hijos míos e hijas mías, tiempos graves como jamás se han vivido en este mundo están a la puerta, estáis viviendo y vais a vivir.
Solamente la unión y de esa unión unidos a Mí os mantendrá fuertes para salir victoriosos junto todas las gracias, bendiciones y protecciones y ayudas que os hemos estado dando a lo largo de estos años y os estamos dando.
¡Ay, hijos míos, que inconscientes sois todavía. No sois conscientes de la gravedad en la que os encontráis y que pronto este mundo no existirá tal y como le conocéis!
Todo pecado será borrado de al faz de la tierra y entonces en ella todo será júbilo, alegría, gozo y felicidad porque las lágrimas por un tiempo largo y el sufrimiento habrá terminado en el reino de mi paz, de la paz, del amor y de la misericordia.
Vosotros y vosotras, y si el Padre no os llama antes, de vosotros y vosotras a Él, sois escogidos para ese reinado.
Por ello, tenéis que ser más perfectos y más obedientes.
No temer al sufrimiento y al dolor en el mundo en el que estáis ahora que uniéndolo a los míos y a los de mi Madre os harán más fuertes. No estáis solos ni lo estaréis, confiar, caminar juntos hasta que llegue el día en que entréis los que el Padre deje aquí en mi reino, en el reino de amor, de paz, de felicidad y de misericordia.
Recordar, vosotros y vosotras, sois una parte de los elegidos y a quien más doy, no solamente a la portavoz sino a todos, eso os pido y más os pediré.
Mis brazos se extienden hacia vosotras y en ellos os abrazo a todos.
¡Cuánto os amo, hijas mías e hijos míos, mi amor no tiene medida, mi amor es infinito, qué no daría Yo por abriros vuestros corazones, y me entendierais que todo lo que os digo es por vuestro bien, llenos de amor y de misericordia, que os necesito, hijos míos, os necesito, necesito almas fuertes y valientes para lo que os viene y vosotros y vosotras sois almas elegidas para ello, sois los apóstoles de los últimos tiempos y apóstoles de los tiempos que van a empezar en el reino de la paz!
Os quiero tanto, mis vidas, porque todas y todos sois mis vidas y no os dejo un instante, mis ojos están posados constantemente en cada uno y en cada una de vosotros y de vosotras, de día y de noche. Recordarlo que el Amor os ama como jamás os amarán y os ha amado aquí en este mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario